Aquella tarde, bajo un Sol apacible, y rodeados de curiosos, esas cuatro palabras resonaban en mis oídos tranquilamente. Cuatro palabras y un abrazo, nada más, fueron suficientes para que la inocencia del amor infantil naciera y se esfumara al día siguiente. "¿Quieres ser mi novio?", había dicho ella como un zarpazo; "Sí", y no dijimos más.
Y realmente no dijimos más, al menos durante los años posteriores.
Han pasado ocho años desde aquél encuentro en el parque deportivo del pueblo.
Han pasado ocho años, y nunca, nunca, nunca, pude probar sus labios. Labios que, ocho años después, ya no lucen tiernos y coquetos, sino fogosos y lascivos, seductores y exquisitos.
Han pasado ocho años, y nunca, nunca, nunca, puede observar sus ojos. Ojos que, ocho años después, no son más ingenuidad ni pureza, sino perdición, aeroplanos que te elevan a lo desconocido y el café que acompaña tus desvelos. Ojos que, seguro estoy, han sido culpables de que, uno que otro cuerdo perdiera la razón, y de que algunos tontos te entregaran el corazón.
Han pasado ocho años, y nunca, nunca, nunca, pude sentir su respiración. Ni sus caricias. Ni sus besos.
Ninguna utopía puede ser comparada con estos pedacitos de sueños que aún respiran y subsisten en mis deseos. Ninguna mujer, puede ser comparada con la que ahora, con su figura delgada y piel fina, se empeña en vivir en mis pensamientos.
Han pasado ocho años, y sin embargo, estoy anclado a ti como cuando te conocí a los cinco; o cuando nos escribíamos cartas; o cuando jugábamos a "las escondidas".
A ocho años de sequía;
A ocho años de ilusiones;
A ocho años de esperanza;
Ocho años después me pregunto, ¿aquella tarde fue real?
El amor platónico, ese que atormenta al corazón y le deja siempre enamorado, muy bonito poema me gusto mucho
ResponderEliminarGracias :D ¡Un abrazo!
EliminarOcho años después enamorado de la misma chica. :) Muy bonito. ;)
ResponderEliminarAunque de hecho, son 13 años ja, ja, ja
EliminarGracias :D Besos