domingo, 17 de abril de 2016

Perdóname, Sor Juana.

«Te he dejado pensando en muchas cosas,
pero ojalá pienses un poco en mí
».
-Mario Benedetti.


Que tengo la habilidad espantosa de saber tomar malas decisiones, dicen los ángeles de mi hombro. Que de todos los caminos posibles, siempre elijo el peor. El más complicado, el laberinto sin fin. Y es que no puedo encontrar placer en conseguir lo que quiero cuando quiero y como quiero. Si no hay lucha no es victoria. Punto. Que siga siendo un guerrero, dicen mis demonios. Que lo estoy haciendo bien y los resultados me van de maravilla. Me dicen que a pesar de todo, hay una cosa en la que nunca me voy a equivocar, y es elegir a quien darle mi amor.
     ¡Cuánta razón tienen! ¡Al diablo con los ángeles! Ellos no saben de amor. En cambio, yo sé que quiero amar hasta quedarme sin dientes. Que existen mujeres a las que les gusta el romance y otras a las que no. Yo voy por las primeras, las demás que se pudran en sus facilidades. Que no es victoria si no hubo lucha, digo yo. Entonces, no puedo querer sin antes haber conquistado. No puedo adorar a quien no me dio guerra y se aferró a su soledad. No puedo amar si no me rechazaron cuando menos una vez y mucho menos si no me causaron noches de insomnio. Si no me inspiran a escribir, a reír, a llorar mientras la pluma corre por los papeles, si no me duelen, si no me agitan, si nada pasa de extraordinario, si no estuve a punto de sentir que el mundo se acababa, no vale la pena.
   Yo sé amar como los profesionales, como los anárquicos viejecillos del siglo pasado. A regañadientes y puntapiés de desesperación. Con cartas, flores, poemas y pasión. ¡Sé amar con el corazón!  Sé amar con sinceridad, y soy consciente de que no se ama a cada minuto. Puedo encontrar a la mujer correcta, llena de universos insondables y apetitosos.
     Soy un maestro en el estricto arte de los caminos largos. Me parece una verdadera delicia tener que soportar todos esos infiernos alrededor de una simple mujer.
     Es una lástima. Semejante habilidad debería ser digna de un premio nobel.
     Para mi mala fortuna, saber amar no es algo que pongas en tu currículum...


4 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho la entrada, la forma como escribes y ese tono crítico e irónico.

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  2. Efectivamente este tipo de amor ya no es valorado, es más valorado ese que se divulga públicamente como "feliz". En fin, que el mundo está muy loco y más locos estamos nosotros por seguir amando.

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    1. «que el mundo está muy loco y más locos estamos nosotros por seguir amando»
      Gracias infinitas por tus hermosas palabras Kéllyta

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